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martes, 4 de junio de 2013

Estamos en la A


viernes, 31 de mayo de 2013

Teddy Gray's Sweet Factory


Martin Parr y su eterna búsqueda de la esencia British nos deja este mini documental de 20 minutos sobre la fábrica de chucherías Teddy Grays en Dudley (West Midlands). Sus dueños actuales presumen de no haber modificado demasiado los métodos de manufactura desde que se fundó el negocio familiar hacia 1826. Más de lo mismo con la contabilidad... Los ordenadores están vetados en esta oficina ejemplar decorada con el imprescindible póster de buenorra en biquini.
Consejo: no prestar demasiada atención a las dentaduras de los trabajadores y entrevistados en general. Teddy Grays no se responsabiliza... ¡Disfrutadlo!



miércoles, 29 de mayo de 2013

Buscando hygrophoroides...


I

Asar Polyporus frondosus (untados con mantequilla,
                                 condimentados, tapados)
                                  hasta que estén tiernos. Picar.
                              Poner arroz silvestre 5X20'
       en agua hirviendo (salar al final).
                            Mezclar.

     Voces cantando los Diez Truenos de Joyce
                                    transformadas
              electrónicamente para generar
   envolventes de truenos; las cuerdas tocando mapas
          estelares transformadas igualmente para generar
                        envolventes de gotas de lluvia (lluvia
cayendo sobre materiales que representan la historia de
                                                               la tecnología).
                              (McLuchan). La última lluvia no cae
               (instrumentos de viento), es decir, el presente.
                      La música se hace naturaleza (Johns).

                                      Hombre/tierra; un problema que hay que
                              resolver.

sistema de autopistas (Ivan Illich): un falso servicio público.

           sin agua salvo si es necesario.

                  Buscando hygrophoroides, encontré
                                         por el contrario abortivus.
              Al volver para coger más abortivus, encontré
          ostreatus en un estado aceptable. Hacia el sur para
                ver los pájaros, descubrí mellea.
                                    Ir a coger setas es empezar desde 
                       cero, no buscar.

                          Boletus.

Extracto de El libro de las setas, John Cage. (Pag. 32)
Publicado por Taller de Ediciones (Universidad de Castilla la Mancha). Traducción de Francisco Deco. Año 2012.

domingo, 26 de mayo de 2013

Silence by John Cage


El libro completo aquí.

lunes, 13 de mayo de 2013

I fear nothing because I have nothing





'I Fear Nothing' is a collection of photographs of posters from the demonstration held on October 15 2011, which led to the occupation of the Parliament staircase in Lisbon. On October 15, the Spanish indignados movement called for a day of global protest. The movement had got its second wind in September, with the "Occupy Wall Street" mass demonstrations in New York. In Lisbon, the protest named "October 15, Democracy goes out!" began with a march across the city. But at 6.30 pm, the protesters invaded the staircase of the Parliament and used it as an amphitheatre to organize a general assembly, the speakers mounted atop a truck addressing the protesters and citizens sitting on the staircase, with the Parliament as their setting. A few hours later, as only a few protesters were still camping in front of the stairs meanwhile recaptured by the police, the empty streets were full of posters that had been held during the demonstration. This contradictory atmosphere, both of rebel (the signs of a speech) and of desolation and abandonment (the deserted streets) – striking objects reduced to the status of still lifes – is what led us to publish these photographs'.
Texto presentación del libro y que podéis encontrar aquí, así como la idea del colectivo que se hace llamar  Ghost y con base en Lisboa.

martes, 16 de abril de 2013

Welles y el polvo

domingo, 14 de abril de 2013

"Cómo ser europeos" por Cees Nooteboom

... Naturalmente, el joven encuentra a su amada y, naturalmente, la pierde, pero no sin haber poblado para ella el puerto de Copenhague con personajes de su primera mitología personal: Scarlatti, Paul Éluard, el poeta español Bécquer y el poeta holandés Lodeizen, que ocultamos celosamente de vuestras miradas tras la valla de nuestra lengua, ya que el holandés es, con el albanés, el idioma más secreto del continente. Al publicar ese libro, me convertí inesperadamente en escritor y, según mi amigo, el filósofo alemán Rúdiger Safranski, ya no me quedaba más que morir, (...) Sin embargo, no morí. Se me había ocurrido algo mejor: me fui a España y, a decir verdad, no me he movido de allí desde entonces, una esquizofrenia europea ya incurable divide mi ser en una parte meridional y una parte nórdica; en invierno, vivo en Amsterdam o en Berlín, en verano, me entrego despiadadamente a España, convirtiéndome así en una de esas criaturas híbridas, incomprendidas dondequiera que vayan, que tienen su residencia en tres lugares distintos, o sea en ninguna parte, quizá uno de los primeros europeos verdaderos, valientes cobayas del nuevo continente, que han incorporado en su propia existencia la unicidad y la pluriformidad. Deberían disecarnos, somos de gran interés para la ciencia. Leemos el Frankfurter Allgemeine Zeitung, The Guardian, Le Monde, Vrij Nederland, La Vanguardia, La Repubblica y, si hace falta, el Diario de Noticias y L'Osservatore Romano, odiamos la tontería de las grandes naciones que no hablan más idioma que el suyo y que se aseguran de que la generación siguiente tampoco lo haga, camuflando, en los televisores y las salas de cine, todas las demás lenguas bajo la de su país, y borrando así hasta los sonidos del idioma extranjero; (...) aprobamos el regionalismo cuando tiene por objetivo la conservación o la consolidación de un patrimonio esencial y nos oponemos a él cuando pretende la exclusión del otro, despreciamos el cáncer de la violencia nacionalista, ya sea llevada a cabo por irlandeses, croatas, vascos o serbios; somos, en una palabra, aquellos a los que nadie escucha.
Cees Nooteboom, Cómo ser europeos. Traducción de Anne-Hélène Suárez.

miércoles, 20 de marzo de 2013

Obsession livre als obra de Kunst

Dos pequeñas exposiciones delicadas y sorprendentes alrededor de los libros. En la galería Nolan Judin, en el Hof del número 83 de la Potsdamer Str. "Magnificent Obsession - The Love Affair Between Movies And Literature", un proyecto de Matthias Brunner que llegó a Berlín con la Berlinale y estará hasta el 6 de abril. Una expo emocionante que reúne un puñado de películas míticas donde los libros y la literatura están presentes. Las proyecciones en cuatro pantallas, las escenas elegidas, la música, el ritmo final logró compungirme hasta la catarsis, de hecho salí soltando un largo discurso sobre la transmisión del legado libresco y humanista, en fin, cosas que aún pasan y me alegran. La nouvelle vague, por cierto, y algunos americanos, supieron darle la mano desde la modernidad a ese pasado.













Por el viejo barrio judío, en la Sophienstr. 21, también en el Hof, está la sala que Gestalten ha aprovechado al final de su tienda-librería para pequeñas exposiciones. Hasta el 21 de abril estará "Fully Booked: Ink on Paper. An Exhibition of Design and Concepts for New Publications", con estos estudios y diseñadores de los que se muestran algunos trabajos muy interesantes: Bruketa & Zinic, Coralie Bickford-Smith, Daniel Eatock, David Pearson, Double Standards, Erik Kessels, Heimann und Schwantes, Herburg Weiland, Isaac Tobin, Isabelle Vaverka, Jim Tierney, Johanna Fuchs, John Gall, Joost Grootens, Jung & Wenig, L2M3, Leftloft, Made Thought, Nicholas Felton, onestar press, Peter Mendelsund, Prill Vieceli Cremers, Ritator, Sam Ita, Stefan Sagmeister, Studio Laucke Siebein, Three Star Books, Visual Editions, and Zumtobel. Y al hilo de esto han aprovechado para sacar un catálogo con bastante más información y sin embargo muy mal acabado.


viernes, 15 de marzo de 2013

Manual de la Chatrisa


domingo, 10 de marzo de 2013

Bye, bye Mitte



La primera vez que visité Berlín, una de las exposiciones que más me gustó fue en el C/O, el centro de la fotografía en la Oranienburger strasse. La exposición recorría 50 años de trabajo del fotógrafo Thomas Hoepker, sus temáticas y su obsesión por la figura de Muhammad Ali. Pero sin duda, lo que más me impactó fue el espacio expositivo -la antigua sede de la central de correos de Mitte, Imperial Postfuhramt - y la forma tan natural de integrar las exposiciones en convivencia con la evidencia del paso del tiempo en un edificio apenas restaurado.  


Esta semana, después de años de negociaciones y de posibles ubicaciones, la sede del C/O Berlín se traslada al edificio de la Amerika Haus cerca de la estación del Zoo, en Charlottenburg. Se sabe que el edificio de la central de correos -de propiedad privada- se ha vendido a un empresario anónimo que planea levantar un hotel de lujo. Ha sido una semana de despedidas; el punto final a un proyecto en un espacio emblemático. Como colofón la colocación del luminoso del artista Robert Montgomery en el tejado del edificio: All palaces are temporary palaces


Y claro, muchos artículos sobre los cambios urbanísticos y especulativos por los que está pasando la ciudad -Mitte está siendo, de momento la gran afectada-, sobre el famoso concepto de la gentrificación, o sobre cuánto queda ya del jugoso lema 'Berlín centro creativo' del que tanto echan mano, cuando les conviene, los políticos. Hay versiones apocalípticas sobre la 'muerte' de lo que Berlín ha significado. Y para otros pocos e ingenuos 'integrados' una versión más positiva que supone que la ciudad está viva, que los proyectos nacen en un sitio, y cambian y se transforman y van a parar a nuevos espacios. En mi caso, ya voy teniendo alguna historia que contar sobre mi 'nueva ciudad' y sobre los cambios de los voy siendo testigo. Y algo bueno: ¡el C/O Berlín ahora estará en mi barrio!

viernes, 1 de marzo de 2013

"Ein Volksfeind" de H. Ibsen en la Schaubühne de Berlin


Había comprado las entradas hace más de un mes, en la última fila, siete euros, porque las obras que se reponen con subtítulos en inglés se agotan siempre muy rápido, a pesar de lo cual la Schaubühne sigue programando poco con subtítulos algo que entiendo como un voto de confianza en la capacidad de aprender alemán de los pobres extranjeros que andamos por aquí. La intención es buena. Pero estamos en Deutschland, Berlin, Charlottenburg, Kurfürstendamm, y representan "Un enemigo del pueblo". Compro antes de entrar la pequeña edición de Reclam que tienen allí mismo en el teatro a la venta junto al resto de libros y estudios de Ibsen. Mein Volksfeind wurde von Christel Hildebrandt übersetzt, y quiero empezar a leerlo hoy mismo.


Ya ya, esto de la entrevista con el actor embarrado es marca de la casa. Recordamos el Hamlet. Pero a diferencia de la versión de Shakespeare, que también realizó Thomas Ostermeier, la versión de Ibsen es floja, ñoña e increíblemente aburrida. Como el texto es una bomba, un preciso mecanismo lleno de intención y sentido social, resulta aún más sorprendente que nada encaje en lo que vi ayer. Mi postura en el teatro alemán es bastante particular porque aunque conozco los textos no puedo seguir palabra por palabra la obra, así que miro el resto del teatro como un niño que aún no entiende del todo, o entiende el significado general pero no las sutilezas.
Actuaciones torpes cuando no directamente amateurs, dirección de actores sin gracia, adaptación con lagunas que deja escenas sueltas y sin sentido, escenografía y vestuario vulgares, intervenciones sobre la decoración sin ningún sentido, música... odio el pop chusco del teatro moderno. En fin, una decepción. Pero la obra tiene media hora gloriosa y esa media hora es la que queda en el recuerdo. El Dr. Stockmann denuncia ante el pueblo que el agua de los Baños que suponen la riqueza del pueblo están envenenada. Su propio hermano, político profesional, y el resto de poderes contraatacan con buenas dosis de demagogia. Este es el debate, ¿a qué llamamos bien común? ¿cuál es el interés principal, la economía, la salud, la verdad, el enmascaramiento? Entonces el patio de butacas se ilumina y se pide al público que participe. Y esto para mí fue emocionante, aun sin entender porque escuchar una voz que se alza entre la gente y luego otra, es una verdadera lección de asamblea, de democracia, de que la vieja nueva Europa aun tiene algo justo que decir. Ibsen es una flecha lanzada por los griegos.

domingo, 24 de febrero de 2013

Lo verdadero y lo verosímil, 3:
cosas de artista


En 1961 el artista italiano Piero Manzoni puso a la venta noventa latas firmadas y autentificadas por él a precio de oro, en las que se indicaba que contenía 30 g de mierda de artista conservada al natural. Sabemos que agotó la tirada, y que sigue revalorizándose. Hace seis años se remató una de ellas en Sotheby's en más de 100.000 euros.
Más allá del significado de esta irreverencia al mundo, nos preguntamos si efectivamente Manzoni da lo que promete o si contiene yeso, como dijo un compañero suyo hace unos años. No tengo noticia de que nadie que la haya abierto haya revelado su contenido. Lógico, imagino que si alguien paga ese altísimo precio no es para pinchar la pelota. Nunca se sabe si uno se verá avocado a deshacerse de su jugoso patrimonio en momentos de vacas flacas. Así que para que el juego continúe, como en la paradoja de Schrödinger, pensaremos que hay mierda y yeso a la vez. Curiosamente, eso mismo es lo que me pregunto cuando leo/oigo/veo a ciertas personas expresándose en los medios de comunicación: ¿qué tendrán en la cabeza mierda, yeso o ambas cosas?

miércoles, 13 de febrero de 2013

Love me Tonight (in Paris)

Love me tonight, Rouben Mamoulian (1932).

viernes, 8 de febrero de 2013

El milagro de la milla como un espejo


"El milagro de la milla" o "La milla perfecta", la carrera de 1954 que corrieron Bannister y Landy, por Inglaterra y Australia respectivamente, por debajo de los cuatro minutos es un hito en el atletismo anglosajón, una de esas leyendas que parece que sólo ellos pueden crear y sostener en el tiempo. Hoy día correr la milla, 1.609 metros, se hace sobre todo en circuitos urbanos como un espectáculo más dentro de la feria continua en la que se han convertido las ciudades. Oficialmente la carrera de la milla fue sustituida por los 1.500 metros que es la distancia que se corre en pista. Hablamos de tradiciones. A todos parecen gustarnos las tradiciones, las familiares, las de nuestras ciudades, las de nuestros países, pero no es "gustar" el verbo, ya sé. Sin embargo cuando un país, o una familia carece de tradiciones, se añoran. Se envidia entonces a otros pueblos cuya forma de vida parece asentarse sobre esas fechas o esos hechos que se rememoran y celebran.
Es solo una carrera de cuatro minutos, pero eso sí, una bonita carrera, con emoción, con potencia, con generosidad en el esfuerzo, con sorpresa final y desmayo. Fue una fiesta en su momento, pero fue sobre todo algo para recordar, algo para contar, para que las nuevas generaciones escuchasen el relato y, al final, fuese una piedra más en el muro de civilización que cada sociedad construye con los medios más o menos rudimentarios que tiene a mano. Por otra parte la tradición es una raya en el suelo; marca un territorio de entendimiento; más allá de esa raya nadie entiende de qué hablamos o puede entenderlo pero no sentirlo como propio. Cerca de casa hay una especie de orden militar que dice datar del 1380, ahí veo a veces a través de la ventana a los alemanes de mediana edad que forman parte de la junta directiva, llevan un gran medallón en forma de cruz y alguna vez que he pasado por allí los veo levantar el brazo, como votando la resolución del día que, me imagino, serán decisiones del tipo: admitimos a tal o cual en la orden; este año nuestro traje de época será jubón gualdiceleste y gregüesco con acuchillados rojos y los sombreros no llevarán pluma. Todo esto se desarrolla en unos salones forrados de madera y plagado de grabados de soldados con grandes bigotes, lanzas en mano y morriones, esos cascos que Castilla puso de moda por toda Europa. Pero dejemos el estilismo militar. Ese tipo de reuniones, lo digo por experiencia, es algo muy parecido a lo que hacen las Hermandades andaluzas: un buen nombre, una insignia, y decisiones poco trascendentes, o sea, una tradición. Pero hay más, hay un consenso, y sólo eso puede hacer grande algo. No es sólo que el pueblo o la familia acepte que aquello es un gran evento. Hace falta una gran maquinaria: necesitamos entrenadores, pistas, jueces, necesitamos a la prensa, necesitamos los negocios, el oro, las palomitas, las banderas, la pistola de salida y también la banda de cornetas, las mantillas, la tv retransmitiendo en directo para España y toda Hispanoamérica, los cirios, los bocadillos, o necesitamos a la madre haciendo el plato especial, a los sobrinos con gorritos de marinero y las viejas canciones de un primo de tu padre que no se sabe muy bien por qué siempre aparece con la guitarra. Al final, correr en menos de cuatro minutos una distancia, o que un Cristo vista con túnica blanca o morada, o asistir a esa reunión familiar se convierte en una cuestión de identidad. Todos miramos, es un espejo que nos refleja en la multitud.

viernes, 1 de febrero de 2013

Laufen!


A pesar de las inclemencias... ¡La redacción de Strudel está en forma!

domingo, 27 de enero de 2013

La niña y el gallo que caminaba hacia atrás


"A los cinco años enseñó a un gallo a caminar hacia atrás. A los veinticinco enfermó de lupus. A los 33, tullida, llegó al Santuario de Lourdes. La vida de Flannery O'Connor, aunque corta, fue tan extraña como sus hábitos y su literatura, retratados en este texto". Así comienza el texto de Juan Forn sobre la vida de Flannery O'Connor y que podéis leer aquí.

"Las buenas personas son muy difíciles de encontrar. Hay que arreglarse con las malas personas, que son tan respetables que resultan horribles, tan horribles que resultan cómicas, tan cómicas que resultan patéticas, tan patéticas que sería horroroso tener piedad de ellas, porque atraería a los demonios del desprecio”.

viernes, 25 de enero de 2013

Au Hasard Balthazar


Como "Au Hasard Balthazar" es una de las obras más conmovedoras, complejas y estéticas que he visto en mucho tiempo, no voy a decir nada que engrandezca la mediocridad de los comentarios hechos sobre ella. Pero como estoy viendo las "Histoire(s) du Cinema", me apropio del estilo Godard para soltar una pequeña contribución a la confusión general:

cántico espiritual
los paisanos
llorar y llorar
animismo
san Francisco bebe
se acabó el flamenco
ser un tonto ser un loco
maledicencia 
salmo 109
soy el burro soy el burro que los lleva
el amante de todas
frágiles cristales
vespro della Beata Vergine
magnificat



Camino a Venecia andaba Sebald en los años 80, la misma década y ciudad en la que se grabó el vídeo anterior, cuando pasa por la ciudad de Este y recuerda la obra de Tiépolo en la que santa Tecla reza ante la ciudad asolada por la Peste. Esto está en "Vértigo". La imagen de la ciudad que expulsa a sus ciudadanos, con la nube de ceniza sobrevolando los tejados y el horror o el schock en sus rostros, me recordó inmediatamente a otro libro de Sebald de reciente lectura "Historia natural de la destrucción".


Llevo un par de noches leyendo, justo antes de cerrar el libro y apagar la luz, la pobre solapa que la editorial Debate dedicó a Sebald cuando publicó "Vértigo". Era 2001, W.G. Sebald moriría en accidente de tráfico en diciembre de ese mismo año, pero lógicamente en la solapa es un autor vivo y yo sonrío con la posibilidad, como si un juego de coincidencias, de tiempos y encuentros pudiesen devolvernos a los buenos.

jueves, 24 de enero de 2013

Marie pleurant

Marie c'est... Au début du film c'est une petite fille. Et à la fin du film c'est encore une petite fille. C'est quelqu'un qui ne pourra jamais être adulte, qui ne sera jamais capable d'un choix, d'un acte raisonné, posé. Elle agit uniquement par instinct, elle se laisse faire, elle subit, quand elle ne subit pas son père c'est parce qu'elle subit Gérard. Et à mon avis elle est perdue dès le départ, à cause de cette passivité. 
Comentarios de Anne Wiazemsky sobre su papel en la película Au hasard Balthazar (1966).

Les pleurants


Les Pleurants. 37 figuras de alabastro pertenecientes al Musée des Beaux-Arts de Dijon y que forman parte del monumento funerario por el duque de Burgundy (Lamentation d'un prince mort). Hasta el 3 de febrero "de visita" en el Bode Museum de Berlín. 

sábado, 19 de enero de 2013

Confusión y sorpresa con "El caballo de Turín"

 

"El caballo de Turín" no es una película alegre. Vi "El caballo de Turín" desde un punto de vista totalmente diferente a como la interpreta, según he leído después, su propio director y otros intelectuales. Durante las dos horas y algo que dura el metraje estaba convencido de que aquel mundo retratado: la casa solitaria en mitad de una tormenta, un viejo cochero y su hija que apenas intercambian unas frases, un caballo que se niega a comer y tirar del carro, todo aquel mundo era el camino que una mente enferma recorría a la locura. Yo veía clara todas las señales y pensaba que era maravilloso que los directores y guionistas hubiesen convertido, como en una especie de transustanciación que se hubiese producido en aquel abrazo, la mente de Friedrich Nietzsche en la vida de aquel cochero y aquel caballo. Las señales eran: el caballo se paraba y el mundo quedaba reducido a un pequeño ámbito, la actividad se reducía, de repente un vecino llegaba y soltaba un discurso loco con visiones conspiratorias, el alcohol cada vez es más importante, el caballo se niega a comer, unos gitanos alteran la rutina y estalla la violencia, el pozo se seca, hay un intento de huida de la casa pero el regreso es inmediato, el mundo se queda sin luz y sin calor. Y todo esto acompañado del viento duro e insistente de un páramo y una banda sonora recurrente hasta el infinito. Y así dos horas y veintiséis minutos. La soledad, la locura, la oscuridad. Lo veía claro.

Al terminar la película vi algún comentario de los directores y alguna crítica. Me sorprendí mucho. Por ejemplo, Rafael Argullol, al que admiro sinceramente y del que, por cortesía de Ignacio F. Garmendia vía postal, tengo aquí pendiente "El fin de mundo como obra de arte", decía Argullol que el discurso que yo había considerado de un demente o un pirómano ideológico de la peor calaña totalitaria, esa que ve conspiraciones universales contra los nobles y puros, le parecía esto:
"En el centro de la película hay un monólogo potente y apocalíptico a cargo de un extraño visitante que aparece y desaparece sin dejar rastro, un monólogo destinado a permanecer como una perla ardiente en la historia del cine. Quien encadena cinco minutos de palabras terribles habla como Zaratrusta, y lo que dice también es propio de Zaratrusta: la nobleza ha muerto porque los depredadores se han apoderado de todo, incluidos nuestros sueños.
Durante todo el día de hoy, imágenes de la película han aparecido como sonámbulos mientras paseaba por la ciudad helada. El Spree y los jardines aparecían en blanco y negro y, sin embargo,  me iba reafirmando en mi teoría, algo que, aunque nadie lo crea, coincidió con la salida de sol tras las nubes. Otra señal, si es que eso sirve de algo.

martes, 15 de enero de 2013

El tiempo de la memoria colectiva





Times Vol. 1 The Puzzling Almanac. El tiempo visto como memoria colectiva a la manera de los análisis teóricos de Aby Warburg en su Atlas Mnemosyne. Más información aquí. Lo he visto ya en un par de librerías y es muy bueno.

lunes, 14 de enero de 2013

Interview de Hans a Hans


Este fin de semana descubrí este libro publicado en el 2009 por la editorial alemana Walter König y que plantea un concepto entrevista muy interesante. A la pregunta del entrevistador -'el curator' Hans Ulrich Obrist- el entrevistado -el artista alemán Hans-Peter Feldmann- sólo puede responder con imágenes.

Un ejemplo:

Don't we know any way out?

Wissen wir keinen Ausweg?



¿Conocemos alguna salida...?

viernes, 4 de enero de 2013

Spot de "Un incendio invisible"


Spot para la novela ganadora del Premio Málaga de Novela 2011.
"Un incendio invisible" de Sara Mesa.
Publicado por la Fundación José Manuel Lara. 
Milhojas hizo diseño del libro y vídeospot. Fotos de Antonio Pérez Gil.

miércoles, 2 de enero de 2013

Chatwin, "Un millón de años de arte"


En ocasiones, gracias a personas que hacen lo que les sale de las pelotas, todo resulta mucho más interesante. Allá por 1972 Bruce Chatwin acepta una propuesta de trabajo para The Sunday Times Magazine como asesor de arte. Uno de sus primeros trabajos consistió en elaborar algo así como un manual ilustrado de la historia del arte. La revista ya había tanteado resultados con un volumen coleccionable anterior titulado "Mil obras clave del siglo XX" que les había hecho ganar unos 60.000 nuevos lectores. Ahora se trataba de repetir la misma estrategia. Chatwin hizo literalmente lo que le dio la gana y creó una especie de manifiesto personal de la historia del arte; un recorrido completamente anárquico fuera de toda premisa academicista. 

Así lo detalla Nicholas Shakespeare en su biografía sobre Chatwin:
La serie apareció durante seis semanas, en el verano de 1973. Se abrió con una fotografía de objetos de piedra utilizados por nómadas africanos, e incorporaba muchos de los objetos favoritos de Chatwin. [...] había fotografías del tamaño de un sello postal de unas alforjas con aplicaciones del Altai, un paisaje de Seghers y la fotografía, tomada por Bruce, de un camión afgano. Aquel camión que llevaba anticonceptivos japoneses, era una de las imágenes que Bruce incluyó para poner en tela de juicio nuestra idea de lo que era el arte. ("A menudo hemos pasado por alto las obras maestras evidentes en favor de curiosidades, e incluso de lo evidentemente malo", advirtió a los lectores).
Se atrevió incluso a incluir una pieza que él y su mujer habían adquirido con parte del dinero de la boda: un tapiz de plumas de papagayo de origen peruano. Bruce Chatwin aclaraba a los lectores de la revista cómo en ciertas tribus peruanas habían descubierto mucho antes que Rothko que "los bloques de color puro flotando unos encima de otros producían un estado de ánimo de tensa calma".



Como colofón al coleccionable explicó: "Nuestra intención ha sido deshacer la compartimentación en periodos y lugares en que la historia del arte es a menudo dividida, y si esta serie ha animado aunque sólo sea a un puñado de personas a ampliar sus horizontes culturales habrá cumplido sus objetivos".
Sea cual fuera el objetivo de Chatwin la revista no captó ni un sólo lector más durante su publicación. La dirección por supuesto le dio el toque por "perder toda consideración con lo que el lector común quiere". Chatwin no duró mucho tiempo en la revista. En breve viajaría a la Patagonia. 

Por cierto, si alguno de ustedes posee algún ejemplar de "Un millón de años de arte" coordinado por Bruce Chatwin sepan que son un poco más ricos.

P.D.: Dejo una foto de The Sunday Time Magazine de los años en los que Chatwin trabajó para la revista; y además, dos capturas del documental emitido por la BBC sobre la vida del escritor en las que  aparece su casa y el salón con el tapiz de plumas de papagayo originario de Perú. Lo podéis encontrar en you tube enterito (dos partes).